bebida vegetal de cáñamo
Las semillas de cáñamo están consideradas como un superalimento, pero,…
¿Qué es un superalimento?
Un superalimento no es más que, alimentos normalmente exóticos (no se producen en nuestro país), con un contenido nutricional muy completo. A menudo son semillas, bayas o productos desecados convertidos en polvo (açaí, maca, bayas de goji, té matcha, maíz morado, etc.) que se añaden en cantidades pequeñas a nuestros zumos, batidos o ensaladas.
Las semillas de cáñamo en concreto, son una fuente vegetal maravillosa de proteínas (contiene los 9 aminoácidos esenciales que nuestro organismo requiere para formar las proteínas y así reparar los tejidos) y éstas son más fáciles que digerir que otro alimento como puede ser la carne o los lácteos.
Además, contiene ácidos grasos esenciales como el omega 3 y el omega 6, básicos para que nuestro organismo funcione de manera correcta (actúan como protector del sistema cardiovascular, ayudan al funcionamiento del cerebro y estimulan las conexiones neuronales, además de tener también un efecto antiinflamatorio). Es rico en hierro y fósforo y por eso, en muchas marcas de complemento nutricional veganas encontraremos las semillas de cáñamo como ingrediente junto con otro tipo de proteínas como es la de guisante y la de arroz.
Éstas semillas las puedes incorporar a tus cremas, ensaladas, puddings, yogures o comerlas tal cuál. Hoy el formato que os traigo es en bebida vegetal que, además de obtener una bebida riquísima, puedes aprovechar el poso para hacer alguna salsa.
INGREDIENTES:
•150 gr cañamotes
•900 ml de agua
•1-2 dátiles (opcional)
ELABORACIÓN:
1. Dejar las semillas en remojo la noche anterior. Con esto, ‘activaremos’ las semillas. Retirar el agua y enjuagarlas bien con un colador.
2. Poner las semillas junto con el agua y los dátiles en una batidora y triturar durante 1-2 minutos. Si los dátiles están un poco duros, dejarlos en remojo con un poco de agua caliente.
3. Filtrar con una bolsa filtradora o con un “Vegan Milker”. Reservar el poso para hacer un porridge.Guardar en la nevera en una botella y ¡voila!